En el marco del
programa municipal + Árboles + Vida”, la Secretaría de Servicios Públicos de
San Francisco llevó a cabo la segunda jornada de plantación de árboles en el
Hogar Diehl del Sienra, donde se proyecta la creación de un nuevo pulmón
verdepara la ciudad. Hasta el momento, ya se plantaron más de 120 ejemplares de
especies autóctonas como moradillo, espinillos y algarrobos.
“Participaron
alrededor de 26 vecinos en estas dos primeras jornadas, y estamos muy contentos
con la evolución del proyecto que en un futuro no muy lejano, este pulmón verde
va a ser una realidad”, expresó Darío Muratore, director general de Servicios
Públicos del municipio.
El plan
contempla la plantación de más de 850 árboles autóctonos, todos provenientes
del Vivero Municipal, con el objetivo de preservar la flora y fauna regional.
La iniciativa busca no solo mejorar el entorno urbano, sino también
concientizar sobre la importancia ambiental de los árboles y fomentar la
participación ciudadana.
Un espacio para
la naturaleza y la comunidad
El desarrollo
del pulmón verde está organizado en etapas,
la primera incluye la creación de una cortina forestal en el sector sur,
que se realizará en distintas jornadas de trabajo voluntario, principalmente
los días sábados. El municipio invita a las familias y vecinos de San Francisco
a sumarse llevando agua, mate, herramientas de jardinería y disposición para
colaborar.
“La idea es que
todos los vecinos interesados en el cuidado del medio ambiente puedan
participar. Queremos que este espacio no solo sea un pulmón verde, sino también
un punto de encuentro, de construcción comunitaria y de educación ambiental”,
agregó Muratore.
En la segunda
etapa, se avanzará con la colocación de una cortina floral en los sectores este
y oeste, que marcarán el ingreso y el frente del espacio. Posteriormente, se
desarrollarán senderos internos con islas de especies autóctonas, pensados para
recorridos escolares y comunitarios.
Beneficios
ambientales y sociales
Muratore destacó
que el proyecto no solo apunta a la reforestación urbana, sino también a crear
conciencia sobre la importancia de los árboles en la vida cotidiana. “Un pulmón
verde no solamente convierte dióxido de carbono en oxígeno. Nos devuelve a la
esencia del hombre en contacto con la naturaleza. Debemos mitigar nuestras
acciones y pensar en el ambiente como parte de nuestro futuro”, sostuvo.
Además, explicó
que este tipo de espacios ayudan a mejorar la calidad de vida urbana: protegen
el suelo de la erosión, conservan la biodiversidad, regulan la temperatura en
verano e invierno, y promueven el encuentro comunitario.