El viernes quedaron en prisión preventiva dos
hombres de 28 y 33 años (L.C.V, alias “El Mexicanito”, y L.M, conocido como
“Pestañita”) que son investigados como autores del homicidio de Federico
Alberto Bazán en Frontera, ocurrido el pasado 22 de octubre.
Además, se les
endilgó a ambos haber intentado apoderarse de dinero e intentado matar a otro
hombre, para lo cual utilizaron armas de fuego sin tener la debida autorización
legal para su portación. Así lo ordenó el juez de la Investigación Penal
Preparatoria (IPP), Javier Bottero, en una audiencia que se desarrolló ayer en
los tribunales de Rafaela.
El fiscal Pedro Machado está a cargo de la
investigación y es quien solicitó que los imputados transiten el proceso
judicial privados de su libertad.
Detalles del hecho
En la audiencia, Pedro Machado relató que los
hechos ocurrieron el miércoles 22 de octubre pasado, aproximadamente a las 20:00,
en la ciudad de Frontera.
El fiscal sostuvo que “en el domicilio de calle
108 al 200 se hizo presente a bordo de un automóvil una pareja con el objetivo
de adquirir dólares en efectivo que el hombre necesitaba para realizar una
operación de compra de soja”. En ese sentido, manifestó que “la pareja iba
acompañada por Bazán, quien intervenía como intermediario de la operación
comercial”.
Machado relató que “fue Bazán quien ingresó al
inmueble en primer lugar, momento en que los dos imputados lo redujeron y le
sujetaron las manos en la espalda con precintos” y agregó que, “inmediatamente
después, el hombre de 28 años salió al exterior para solicitarle al interesado
de comprar la moneda extranjera que bajara y ayudara a contar los billetes,
mientras la mujer se quedaba arriba del automóvil”.
Sostuvo el funcionario del MPA que “una vez en
el interior del inmueble, el mayor de los imputados apoyó un arma de fuego en
la cabeza del hombre mientras junto con el otro imputado que también tenía en
su poder un arma de fuego, lo agredieron con culatazos en la cabeza mientras le
exigían que les dijera dónde tenía el dinero”.
Continuó su relato Machado diciendo que
“inmediatamente después, el hombre de 23 años se dirigió al exterior y le
exigió a la mujer que estaba en el auto apuntándole con el arma de fuego que
portaba que le entregara el dinero que tenían, momento en el que en el interior
del inmueble Bazán y el hombre interesado en adquirir los dólares enfrentaron
al otro imputado, forcejearon y salieron a la vereda”.
“Allí, ambos imputados, actuando de manera
conjunta y conscientes de su accionar, comenzaron a efectuar varios disparos
contra Bazán y el otro hombre con la clara intención de darles muerte”, agregó.
Finalizó diciendo Machado que “los disparos
efectuados por ambos imputados fueron dirigidos hacia zona vitales de las
víctimas que causaron el fallecimiento inmediato de Bazán y heridas de gravedad
en el otro hombre, que determinaron su internación en el hospital de la ciudad
de San Francisco (Córdoba), por lo que el objetivo de darle muerte a este
último no fue concretado por razones ajenas a la voluntad de los imputados”.
Riesgos procesales
Machado manifestó que “con el grado de
probabilidad requerido en esta instancia del proceso, el juez dio por
acreditado –con las evidencias que presentamos– que los hechos se sucedieron
del modo en el que lo planteamos desde la Fiscalía y que ambos imputados fueron
sus autores con igual distribución de tareas”.
Asimismo, el funcionario del MPA sostuvo que
“el magistrado contempló que la pena en expectativa es de cumplimiento efectivo
en virtud de la calificación legal seleccionada por lo que la pena en
expectativa no sería de cumplimiento condicional, por lo que entendió que
estaban vigentes el peligro de fuga y el de entorpecimiento probatorio”.
Agregó el fiscal que “Bottero consideró
necesario proteger a las víctimas ya que no es ilógico pensar que los hombres
investigados intenten influenciarlos, amenazarlos u hostigarlos con el
propósito de mejorar su situación procesal”.
“Además, consideró el juez que no existe otra
manera de neutralizar los peligros procesales que no sea con la prisión
preventiva”, concluyó Machado.
Calificación penal
A ambos imputados se les atribuyó la coautoría
de los delitos de robo calificado (por uso de arma de fuego) en grado de
tentativa, homicidio calificado criminis causa agravado (por su comisión con
arma de fuego) y homicidio calificado criminis causa agravado (por su comisión
con arma de fuego) en grado de tentativa. Asimismo a cada uno de los imputados
se les endilgó la autoría de portación ilegítima de arma de fuego de uso civil.