El juez de Investigación Penal Preparatoria, Gustavo Bumaguin, dispuso la prisión
preventiva de Héctor Argentino Gallardo,
de 54 años, también conocido por su apodo de "Patrón", quien
compareció en la mañana de este jueves en una extensa audiencia donde se
debatieron las medidas cautelares a aplicársele.
Gallardo fue imputado por el fiscal Martín Castellano como presunto autor
de los delitos de amenazas coactivas calificadas por tener como propósito obligar
a una persona a hacer abandono del lugar de su residencia habitual en carácter
de autor; y homicidio doloso agravado por su comisión con arma de fuego, en
calidad de instigador.
De estos hechos resultó víctima Carlos Cabrera, quien fue asesinado por
sicarios el 23 de abril de 2022, hecho donde a Gallardo le adjudican ser el
autor intelectual.
Vía virtual
Gallardo fue días atrás detenido en la
localidad de Puerto Madryn, provincia de Chubut, y asistió a la audiencia por
vía virtual, desde el penal de Coronda, donde está recluido. Lo hizo vestido
con el uniforme naranja reservado a los presos de alto perfil. Fue asistido
legalmente por los penalistas Claudio
Torres del Sel y Federico Scarinci,
publica Rafaela Noticias.
Gallardo está imputado de haber ordenado el
crimen de Cabrera, ocurrido el 23 de abril de 2022 en Frontera. El hombre fue ejecutado
por sicarios que, según el fiscal Castellano, actuaron enviados por Gallardo, a
quien se sindica como presunto jefe de un clan criminal dedicado a la
comercialización de estupefacientes y otros delitos. Sin embargo, en la
audiencia de este jueves Castellano recordó que la imputación es por amenazas
coactivas contra Cabrera y el posterior homicidio calificado de la víctima.
¿Qué dijo Gallardo?
"Niego rotundamente el hecho que se me
imputa. A Cabrera lo quería como a un hijo, lo conozco desde que nació. Hemos
tenido millones de discusiones y siempre al otro día comíamos un asado o
hablábamos", dijo primero.
En su testimonio, se despegó del crimen insistiendo
en su relación de cariño y cercanía con la víctima. "Es mi compadre
Cabrera, lo quiero como un hijo más, que en paz descanse. Hemos tenido malos
tratos, muchas discusiones, sí, incluso iba a mi casa, bien lo dijeron en la
acusación. Me caía y me decía ‘ey viejo loco, te traje un asado’. Fui un padre
más para él, ni el Pelado, el papá de él, le daba los consejos que le di
yo", agregó.
En la misma línea, Gallardo sostuvo que
"nadie es dueño de quitarle la vida a nadie, y menos con él, a quien
siento como si fuera un hijo. Estuvo en mi casa charlando, días antes de lo que
pasó. Su juego conmigo era venir y despeinarme, bromeaba, me decía ‘viejo loco’.
Ni a él ni a nadie le quitaría la vida. Jamás nos fuimos a las manos, y menos
llegaría a esta instancia" remarcó.
Gallardo, ante una pregunta de su abogado, le
quitó credibilidad a uno de los principales testimonios aportados por el
fiscal: el de una sobrina que aparece como testigo de cargo en la causa.
"No está en sus cabales, consume psicofármacos y cocaína, tiene problemas
psiquiátricos y estuvo bajo tratamiento", apuntó el Patrón.