No paran. Cada vez hay más modalidades de estafas en las redes y diferentes aplicaciones. Por esto alertan a las familias de todo Córdoba por una nueva forma de engañar a adultos mayores para hackear las cuentas bancarias y robarle dinero.
En esta oportunidad es una publicación que se viraliza principalmente en Facebook donde se hacen pasar por la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) y ofrecen un plan especial para jubilados.
Lamentablemente al menos un hombre de San Francisco ya fue víctima en las últimas horas, donde los ciberdelincuentes le hackearon su cuenta bancaria y sacaron un crédito de 250 mil pesos a su nombre.
“Si ves algo así
en tu Facebook no entres, es una estafa”, alerta Verónica, hija del hombre
que fue engañado.
En esta línea, explicó
que “si les escribís a ese WhatsApp, te llaman, te clonan el teléfono y te
sacan un préstamo en el banco que cobrás tu jubilación”.
“Lo estafaron hoy
a mí papá. Nadie te va hacer un descuento de nada y menos Epec te va a llamar
para devolverte dinero”, sostuvo.

Con mucha razón, opinó
que “Facebook debería de regular este tipo de publicidades ya que regula todo”.
Antecedentes
Cabe destacar que
en San Francisco existen antecedentes judiciales donde personas damnificadas
fueron estafados por ladrones y les sacaron créditos preaprobados por los
bancos.
La Justica falló
a favor del damnificado, obligando al banco a hacerse responsable de los costos
y daños ocasionados. De hecho, el año pasado el Banco Central de la República
Argentina emitió un comunicado para que las entidades financieras empiecen a
verificar fehacientemente la identidad de las personas que solicitan la
acreditación de créditos preaprobados a través de los canales electrónicos para
reforzar las normas de seguridad. Además, están obligadas a hacer un monitoreo
y control, como mínimo, de los puntos de contacto indicados por el usuario y
comprobar que no hayan sido modificados recientemente.
La verificación
deberá hacerse mediante técnicas de identificación positiva, lo que refuerza la
obligación que ya tiene la entidad financiera de la responsabilidad de detectar
la posibilidad de engaños de ingeniería social.