El
Gobierno de Javier Milei anunció la disolución del Fondo Fiduciario Público “Pro.Cre.Ar”, un programa que desde 2012
facilitaba el acceso a la vivienda mediante créditos hipotecarios. Esta medida
plantea cambios entre los miles de beneficiarios actuales.
La
disolución se oficializó a través del decreto 1018/2024, enmarcado en el plan
gubernamental de optimizar recursos públicos. Según los informes de la
Sindicatura General de la Nación (SIGEN), el fondo representaba una carga
significativa para las finanzas estatales y no lograba la transparencia y
eficiencia requeridas en la administración pública.
¿Qué cambiará?
Una
de las principales dudas entre los beneficiarios es cómo afectará esta medida a
sus créditos o viviendas ya adjudicadas. Para aquellos que tienen un crédito en
curso o ya han sido adjudicados, el decreto establece algunas pautas claras
para asegurar la continuidad de sus contratos sin modificaciones.
1.
Continúa la gestión de créditos con el banco Hipotecario: el Ministerio de
Economía ha sido autorizado a firmar un contrato con el Banco Hipotecario S.A.,
que asumirá la administración de los créditos existentes bajo las mismas
condiciones ya pactadas. Esto significa que los beneficiarios continuarán
realizando sus pagos al Banco Hipotecario, sin cambios en sus cuotas ni en las
condiciones de su crédito hipotecario.
2.
Transferencia de bienes a otras entidades: los inmuebles del Pro.Cre.Ar que no
tengan contratos de obra vigentes serán transferidos a la Agencia de
Administración de Bienes del Estado (AABE), permitiendo una reubicación de
estos recursos y, posiblemente, nuevas oportunidades para que las provincias y
municipios gestionen las propiedades en beneficio de sus comunidades.
3.
Garantía para los beneficiarios adjudicados: los beneficiarios que ya han sido
adjudicados con una propiedad o están en proceso de construcción pueden tener
la tranquilidad de que el banco Hipotecario seguirá administrando sus contratos
bajo las mismas condiciones. Las obligaciones pendientes o nuevas que surjan
durante el proceso de liquidación serán cubiertas con los fondos generados por
la cobranza de créditos o por la venta de inmuebles del fondo.
Planes en proceso o no adjudicados
Para
aquellos solicitantes que estaban en espera de adjudicación o en las primeras
etapas del proceso, la situación es menos clara, ya que el decreto no establece
explícitamente un plan de continuidad para proyectos no adjudicados. Sin
embargo, el Ministerio de Economía, en colaboración con el banco Hipotecario,
evaluará cada caso en función de las disposiciones del Contrato de Fideicomiso
y las normativas complementarias.
Que las viviendas las hagan
otros
Con
la disolución del Pro.Cre.Ar, el Gobierno se aleja de la intervención directa
en la financiación de viviendas, argumentando que esta tarea corresponde a las
instituciones bancarias, tanto públicas como privadas.
Las
reformas establecidas por el Banco Central en 2023, junto con la reducción de
la inflación, buscan incentivar el otorgamiento de créditos hipotecarios por
parte de las entidades financieras, facilitando el acceso a la vivienda sin la
necesidad de un fondo estatal como el Pro.Cre.Ar.