En lo que va de esta gestión el oficialismo
local y provincial, con Damián Bernarte y Martín Llaryora a la cabeza,
respectivamente, llevaron adelante varios cortes de cintas de inauguración de
obra pública importante, desde pavimentación en barrios, cloacas, gas natural,
Polideportivo Social y hasta Viviendas Semillas a varias familias, entre otras.
Pero lo que se percibe y transmite desde el
Ejecutivo Municipal, con la inauguración de la renovación del Centro Cívico se
trata de una de las puestas en infraestructura más preponderante de los últimos
tiempos.
Es que en el marco de una serie de
transformaciones resonantes que se planifican en sectores centrales de la
ciudad como ha sido la rotonda de ingreso (Ruta 19 y Ruta 158), en marcha la obra
de la bicisenda en altura, próximamente la nueva sede policial y el proyecto
del Parque Cincuentenario, la conexión de Avenida del Libertador es, tal vez,
la que mayor apoyo tuvo de la ciudadanía, instituciones y hasta dirigentes
políticos (Al menos la oposición no salió a criticarla con tanta intensidad). Y,
además, desde el oficialismo lo construyen discursivamente con una mirada del
cambio de una época de fisonomía para la ciudad.
“El proyecto marca un antes y un después en la
ciudad y constituye uno de los hitos principales del plan de obras estratégicas
desarrollado sobre el antiguo corredor ferroviario”, sostiene Bernarte y
agrega: “Yo le llamo ‘darle la bienvenida al futuro en San Francisco”.
En este sentido, remarca que luego de haber
realizado obras primarias fundamentales como desagües pluviales, cloaca máxima
y gas natural durante las gestiones de García Aresca y Martín Llaryora como
intendentes, estas obras actuales son parte del proyecto de modernización de la
ciudad: “Después de haber trabajado bajo tierra, empezamos a pensar en cómo la
ciudad le da la mano a la modernidad, cómo muestra una nueva cara después de
muchas décadas de permanecer con la misma foto”.
El
intendente reconoce que este tipo de obras pueden resultar “disruptivas” para
parte de la ciudadanía, pero el mensaje es que a mediano y corto plazo las
termina adoptando y utilizando como en el caso de la Tecnoteca. En esta
ocasión, sabe que esta obra en particular será la transformación del principal
punto céntrico de San Francisco, y por mucho tiempo.
En el acto, que también encabezará el
gobernador Martín Llaryora, seguramente no faltará ningún dirigente de la
ciudad y la Provincia que sea del riñón peronista surgido en estas tierras. Es
que la inauguración de este domingo será más que un corte de cinta, será volver
a mostrar la gestión en obras, la transformación de la ciudad, pero a la vez,
se espera algún mensaje para la construcción política de cara a 2027 luego del sacudón
electoral de octubre pasado.