Nicolás Albera
El
Tribunal de Cuentas de la Provincia de Córdoba dio el visto bueno para que se
avance con los dos tramos inconclusos de la autopista 19, que terminará de unir
las ciudades de Córdoba y San Francisco.
Se
trata de uno de los anhelos del gobernador Martín
Llaryora, quien decidió hacerse cargo de una obra que los gobiernos de Mauricio Macri y Alberto Fernández (avanzó un poco más que el primero) no quisieron
finalizar. Mucho menos Javier Milei,
quien pasó su feroz motosierra por la obra pública.
Según
pudo conocer Up de fuentes del
Ejecutivo provincial, está la aprobación del Tribunal de Cuentas para
transferirle el dinero de la obra a la empresa Caminos de las Sierras, para que
luego llame a licitación. El dato no es menor si se tiene en cuenta que el
Tribunal de Cuentas de Córdoba, tiene mayoría opositora y es presidido por el juecista
Beltrán Corvalán.
Un grito fuerte
La
autopista de la ruta 19 atraviesa la trayectoria política de Llaryora. Empezó
con aquel “grito de San Justo” cuando era intendente de su ciudad y junto a
otros dirigentes departamentales exigieron obras de infraestructura para esta
región.
Como
vice de Schiaretti en la Provincia, participó en Arroyito de la firma del
primer traspaso de la Nación: fueron 50 kilómetros que iban de Córdoba a Río
Primero.
“Concluirla
sería un acto de justicia ante la postergación y desidia de otros políticos. Si
me toca ser el gobernador que le toque terminarla, le voy a meter con todo”,
decía Llaryora meses atrás, antes que el gobierno nacional decida cederle los
derechos de la obra tras un acuerdo firmado en la Casa Rosada, en junio pasado,
junto al jefe de Gabinete de la Nación, Guillermo
Francos.
Con
la firma del acuerdo entre la Nación y la Provincia, será la actual gestión, a
través de la empresa Caminos de las Sierras, la que reinicie los trabajos
correspondientes en los 65 kilómetros que restan para su finalización.
Previamente se deberá llamar a licitación para elegir a las constructoras que
se hagan cargo, que, según fuentes del Ejecutivo provincial, se daría a inicios
de febrero próximo: “Por ahora se está completando un papeleo mínimo que
falta”, aclaró la fuente.
Por
otra parte, la idea es que los trabajos se reinicien este 2025, sobre mediados
o finales del año. Se trata de un proceso largo debido a que la obra se
encuentra paralizada y afectada por el paso del tiempo, el abandono y las
condiciones climáticas.
La
traza se extiende a lo largo de 212 kilómetros, entre las ciudades de San
Francisco y Córdoba capital. Cuenta con ese primer tramo de 55 kilómetros, entre
la capital provincial y Río Primero, consolidado y finalizado hace años, el
cual fue ejecutado por el Gobierno de Córdoba.
A
este le sigue el trayecto habilitado entre Río Primero y Santiago Temple y el
tramo –inaugurado, pero no habilitado- entre Santiago Temple y la localidad de
Tránsito. La obra continúa con los 57,8 kilómetros ya habilitados y que unen la
ciudad de Arroyito con Cañada Jeanmarie.
Es
antes y después de este tramo donde la obra presenta trayectos inconclusos y
paralizados: 29,4 kilómetros entre Tránsito y Arroyito (avance del 50%) y otros
35,5 kilómetros entre Cañada Jeanmarie y San Francisco (avance del 25%).
Si
algo identificó a la gestión provincial de Juan
Schiaretti, entre otras cosas, fue la cantidad de kilómetros de ruta
construidos. Llaryora también quiere que su gobierno quede marcado por obras
viales clave. Y por estos días, en el Panal celebra la buena noticia.